El motivo de celebración. Aunque parezca obvio es importante tenerlo claro pues cada celebración requiere una planeación especial, teniendo en cuenta por ejemplo que los invitados de un cumpleaños de un niño no siempre serán los mismos que los de un cumplaños de adultos, los tipos de eventos no aplican para todas las celebraciones, por ejemplo no podemos planear un coctel para un matrimonio.

Los invitados. Es importante tener en cuenta los gustos, edades, intereses y cantidad, de nuestros invitados y aunque no podemos darle gusto a todos podemos planear una celebración en la que todos se sientan a gusto.

Planear y organizar con antelación: Cada celebraciòn requiere su tiempo de planeación y organización, no podemos organizar todo de un día para otro pues la improvisación no cabe en la celebración. Entre la cantidad de invitados sea más grande y la celebración requiere muchos ajustes, es aconsejable tomarse el tiempo con calma para planear y garantizar el exito de ese momento memorable.

Ayudas extra. Cuando la celebración requiere toda una elaborada y detallada producción es aconsejable contratar a los mejores en organización de eventos, estas empresas son especializadas en desarrollar para ti todo un plan que incluye desde el diseño de tarjetas hasta la ejecución de la misma celebración.